Tenía pendiente hablaros de mis últimos días de trabajos titiriteros por Madrid. Bueno, más bien en Móstoles, que fue dónde se pudo hacer la última etapa de ensayos y el estreno del montaje en cuestión. Se trata de una colaboración con la compañía madrileña LOS BARRACOS que este verano me propuso su directora Amaya Curieses. Ya nos conocíamos porque hace dos años colaboramos en un gran montaje popular que se hizo en Parla del Cid (Nos encargamos de la creación de varias escenas con títeres). En realidad se trataba de un reencuentro con un nuevo paisaje de fondo: el Peribáñez de Lope. Los Barracos es una compañía que recoge el espíritu que en su día animó a la que creó el poeta Federico García Lorca en tiempo de la República española, está constituida por gente joven e inquieta que juega al teatro con verdadera entrega y cree con honestidad en su futuro. He disfrutado enormemente todo el tiempo que he pasado con ellos, por su receptividad, su confianza y su alegría y quería dejar aquí testimonio de ello. También quiero agradecer a Amaya su delicado trato conmigo y la confianza que en todo momento percibo que tiene en mí y en mi manera de entender el teatro y sus transposiciones escénicas. El resultado final nos ha complacido a todos, incluido el público que asistió al estreno. Confío en que este Peribáñez ruede y se deje ver por algúno de los escenarios valenciano. Queda absolutamente recomendado desde aquí.
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